Se denomina contaminación radiactiva o contaminación nuclear a la presencia no deseada de sustancias radioactivas en el entorno. Esta contaminación puede proceder de radioisótopos naturales o artificiales.
La primera de ellas se da cuando se trata de aquellos isótopos radiactivos que existen en la corteza terrestre desde la formación de la Tierra o de los que se generan continuamente en la atmósfera por la acción de los rayos cósmicos. Cuando estos radioisótopos naturales se encuentran en concentraciones más elevadas que las que pueden encontrarse en la naturaleza (dentro de la variabilidad existente), se puede hablar de contaminación radiactiva. Ejemplos de estos radioisótopos pueden ser el 235U, el 210Po, el radón, el 40K o el 7Be.
La contaminación radiactiva, se designa a la causada por la diseminación de material radiactivo en el medio ambiente. Dos de los contaminantes más perjudiciales para el bienestar de los seres vivos son el uranio enriquecido y el plutonio.
El uranio enriquecido se origina en instalaciones médicas y de investigación, en reactores nucleares, en la munición blindada, en submarinos y en satélites artificiales. La exposición a este tóxico provoca enfermedades en el riñón, en el cerebro o en el hígado.
Mientras que el plutonio es una sustancia muy tóxica para el hombre y el medio ambiente, porque permanece contaminando decenas de miles de años.
Cuando se habla de contaminación radiactiva, en general se tratan varios aspectos:
La contaminación de las personas. Esta puede ser interna cuando han ingerido, inyectado o respirado algún radioisótopo, o externa cuando se ha depositado el material radiactivo en su piel.
La contaminación de alimentos. Del mismo modo puede haberse incorporado al interior de los mismos o estar en su parte exterior.
La contaminación de suelos. En este caso la contaminación puede ser solo superficial o haber penetrado en profundidad.
La contaminación del agua. Aquí la contaminación aparecerá como radioisótopos disueltos en la misma.
Existen otros contaminantes radiactivos con graves consecuencias para el hombre, las plantas y los animales.
La radiactividad se produce cuando ciertos átomos al desintegrarse desprenden partículas como el alfa, beta, neutrón y rayos gamma.
Pero al contrario de lo que muchos opinan, convivimos a diario con la radiactividad porque algunos se originan de forma natural. Por ejemplo, ciertos elementos se forman de manera nata como el radón y los rayos cósmicos que llegan a la tierra.
Pero la peligrosidad de la radiactividad, comienza cuando la cantidad con la que el ser humano entra en contacto varía.
Pero la peligrosidad de la radiactividad, comienza cuando la cantidad con la que el ser humano entra en contacto varía.
Causas de la contaminación radiactiva
La contaminación radiactiva puede producirse por accidentes humanos, por el uso de materiales nucleares y por la disposición final deliberada de los residuos.
Los ensayos nucleares que se operan al aire libre son considerados peligrosos, porque los gases que se desprenden quedan en la atmósfera contaminando el aire, y el resto que cae al suelo puede llegar a alterar el agua.
La refrigeración de los reactores nucleares se utiliza agua que luego es devuelta al río o mar de donde provenía, contaminando el agua y alterando el medio en que viven cientos de animales acuáticos.
En el ámbito laboral como son los hospitales, los empleados que trabajan con RayosX están expuestos de forma constante y a diario a la radiactividad.
Consecuencias de la contaminación radiactiva
La contaminación nuclear puede estar presente en materiales, en elementos de uso diario, en personas y en el medioambiente.
La exposición a estos contaminantes trae graves consecuencias:
• Altas dosis de radiactividad puede provocar la muerte
• Pequeñas dosis pero de forma reiterada puede acarrear caída del pelo, leucemia, cánceres y defectos degenerativos
Frente a la contaminación radioactiva existen muchos protocolos a seguir para que en las poblaciones donde ha ocurrido algún escape se vea lo menos afectada posible.
Los responsables de estas acciones sugieren:
*Refugiarse en sótanos de casa para no entrar en contacto con los contaminantes.
*Si se ha mantenido contacto con la piel, se debe duchar y cepillar muy bien el pelo y el cuerpo con detergente, y arrojar a la basura la ropa.
*Si se ha inhalado algún infectante es aconsejable tomar pastillas de yodo.
Contaminación Radiactiva, responsabilidad de todos en combatirla