Cada año se extinguen miles de especies animales. Animales que en otro tiempo habitaban la Tierra en abundancia ahora están desapareciendo permanentemente de nuestro planeta a un ritmo vertiginoso. Los científicos calculan que la tasa de extinción actual es 1.000 veces mayor a lo normal debido a un factor: los seres humanos.
El término silvestre se utiliza como adjetivo para hacer referencia a aquellos seres vivos que nacen y se desarrollan en la naturaleza, de manera salvaje y sin domesticación o sin formar parte de una civilización. Si bien el término se aplica en la mayoría de los casos a las plantas y vegetales, también puede llegar a ser utilizado para animales e incluso seres humanos que crezcan en esas condiciones.
La noción de silvestre tiene que ver con aquella de rusticidad en el buen sentido de esta palabra. Lo agreste, lo rústico o lo no domesticado es lo silvestre: aquello que nació y se desarrolló en un medio no habitado ni dominado por el ser humano y su sistema cultural específico.
¿Qué es la Vida Silvestre?
Vida silvestre se refiere a todos los vegetales, animales y otros organismos no domesticados. Organismos domesticados son aquellos que fueron adaptados para sobrevivir con la ayuda de los humanos, después de muchas generaciones. Especies de plantas y animales fueron domesticadas muchas veces para el beneficio humano en todo el planeta, lo que acarreó un gran impacto sobre el medio ambiente, tanto positivo como negativo.
La vida silvestre o vida salvaje puede ser encontrada en todos los ecosistemas. Desiertos, florestas tropicales, planicies y otras áreas -incluyendo las ciudades más desarrolladas- todas tienen distintas formas de vida silvestre. Aunque en la cultura popular la expresión generalmente se refiera a animales aún sin contacto con la presencia humana, la mayoría de los científicos concuerdan que la vida silvestre alrededor del planeta sufre, de un modo o otro, del impacto de las actividades humanas.
¿Cual es la importancia de la Vida Silvestre?
Cuando se extingue una especie animal, los animales irremplazables son solamente parte de la pérdida. Aunque podemos considerar el mundo animal como separado del nuestro, nuestras vidas y las suyas están entrelazadas, conectadas por un millón de vínculos. Las plantas, los animales, las personas y el medio ambiente, juntos constituyen una comunidad biológica —un ecosistema— en el cual cada una de las partes depende de la otra para su supervivencia. Cuando una parte de la comunidad se desequilibra o se elimina, todo el sistema sufre.
¿Qué es la CITES?
CITES es la sigla inglesa de The Convention on International Trade in Endangered Species of Wild Fauna and Flora (Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres).
¿Cual es el impacto de especies introducidas que amenazan a la Vida Silvestre?
Los ejemplos de las especies que se han vuelto invasoras y amenazan a la vida silvestre en muchos lugares del mundo incluyen a los ratones, gatos, cabras, diente de león, ciertos nenúfares, etc. A menudo ciertas especies que no son muy abundantes en su lugar de origen se vuelven invasoras fuera de control en otros lugares de climas similares.
La razón aún no está muy clara; algunos, incluso Charles Darwin pensaban que no sería muy probable para una especie exótica el reproducirse en abundancia fuera de su ambiente habitual. La verdad es que esto es cierto para la gran mayoría de las especies introducidas en otros hábitats. Pero ocasionalmente algunas especies tienen gran éxito después de un período de aclimatación y pueden llegar a convertirse en plagas. Una de las razones es que han dejado atrás a los enemigos naturales que limitaban sus poblaciones en el lugar de origen. En tal caso pueden competir y desplazar a la vida silvestre nativa.
La importancia de la vida salvaje es que, gracias a ella, hay un equilibrio importante en todos los niveles de la la pirámide de alimentación, los procesos de reproducción de la flora y de la fauna se mantienen y hay un equilibrio de todo el planeta. Cualquier intromisión artificial en ella provoca un daño irreparable y, esencialmente, es imposible de solucionar. Debemos tener en cuenta que el hombre es una especie más dentro del propio planeta y que, aun sabiendo que es la especie dominante en él y que es capaz de controlar y dominar una gran parte de los recursos del mismo, esto no le obliga ni le hace merecedor de la destrucción de espacios importantes para la propia existencia de la vida.
Cadenas de extinción
Este grupo trata de efectos secundarios. Todas las poblaciones silvestres de seres vivos tienen numerosas interrelaciones con los demás seres vivos. Los animales herbívoros, como el hipopótamo, tienen poblaciones de pájaros insectívoros que se alimentan de sus parásitos. Si el herbívoro desaparece algunas de estas aves también serían afectadas. Ciertas plantas dependen de polinizadores específicos. Si el polinizador desaparece la planta también puede llegar a desaparecer. A su vez los herbívoros que dependen de esa planta también sufrirían las consecuencias. Es lo que se suele llamar el efecto dominó, una cadena de reacciones con efectos lejanos. Estos procesos repercuten más allá de las especies inmediatamente afectadas y pueden poner en riesgo a la comunidad ecológica entera.
La destrucción de la Vida Silvestre
En la Edad de Piedra, los humanos cumplían labores de cazadores y recolectores. En ese entonces, se tenía una vital dependencia de la vida silvestre, en ambos (animales y plantas), por ser fuente de alimentos. Esto ha causado que por diversos motivos, se hayan extinguido especies a causa de la caza indiscriminada por parte de los humanos.
La pesca, cacería y recolección de vida silvestre, forma parte vital de muchas sociedades humanas de hoy en día. La explotación de las poblaciones silvestres ha sido una de las características predominantes de los humanos, desde su migración original desde el continente africano hace unos 130 mil años.
Este ha sido un fenómeno tan impactante que se ha establecido que los humanos son el sexto evento de extinción más grande que haya ocurrido en la tierra. La destrucción de la vida salvaje no siempre desemboca en la extinción de la especie; pero sí se traduce a la pérdida importante de especímenes de una especie, que llega al punto en el que el daño causado es muy grande e imposible de reparar.
La sobre-caza ocurre cuando la cacería se ejecuta a niveles mayores de los que la capacidad reproductiva de una población, puede reabastecer a la especie. El efecto de esto puede notarse en especies donde el crecimiento es mucho más lento como en los peces de gran tamaño. Cuando una población salvaje es cazada, se produce una disponibilidad aumentada de recursos alimenticios para esa especie, y al mismo tiempo, se crea una pérdida de balance en la población. También se debe tomar en cuenta a las especies que están aisladas en islas y demás entidades geográficas, ya que tienen un riesgo mucho mayor de sufrir cacería insostenible.
Los humanos históricamente han separado la civilización de la vida salvaje de muchas maneras, incluyendo el ámbito social, legal y moral. Pero aún existen animales que se han logrado adaptar al estilo de vida urbano, como los perros, gatos y ratones. La religión también se ha encargado de tomar animales como imágenes sagradas, además de que recientemente se ha creado una especial consciencia por la vida de los animales.
Los humanos históricamente han separado la civilización de la vida salvaje de muchas maneras, incluyendo el ámbito social, legal y moral. Pero aún existen animales que se han logrado adaptar al estilo de vida urbano, como los perros, gatos y ratones. La religión también se ha encargado de tomar animales como imágenes sagradas, además de que recientemente se ha creado una especial consciencia por la vida de los animales.
¿Cual es el Día Mundial de la Vida Silvestre?
La Asamblea General de las Naciones Unidas decide proclamar el 3 de marzo Día Mundial de la Naturaleza.
El 20 de diciembre de 2013 la Asamblea General de las Naciones Unidas en la Resolución 68/205 "decide proclamar el 3 de marzo, día de la aprobación de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres, Día Mundial de la Naturaleza".
En este Día Mundial de la Vida Silvestre, exhorto a todos los ciudadanos, las empresas y los gobiernos a desempeñar el papel que les corresponde en la protección de los animales y las plantas silvestres. Las medidas que adoptemos cada uno de nosotros determinarán el destino de la fauna y flora silvestres del mundo. ¡El futuro de la vida silvestre está en nuestras manos!»
¿Qué podemos hacer?
Todos podemos ayudar
1. Adoptar.
Desde animales salvajes a lugares salvajes, hay una opción para todos. Junto con los compañeros de clase, se puede adoptar a un animal de una organización de conservación de fauna silvestre, como el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF). Las adopciones simbólicas ayudan a financiar organizaciones.
2. Hacerse voluntario.
Si no se puede dar dinero, se puede donar tiempo. Muchas organizaciones y zoológicos tienen programas de voluntariado. Se puedes ayudar a limpiar las playas, a rescatar animales salvajes o a enseñar a los visitantes.
3. Visitas.
Los zoológicos, acuarios, parques nacionales y refugios de fauna silvestre son hogar de muchos animales salvajes. Con una visita a esos lugares se puede aprender más sobre las especies de nuestro planeta, escuchando a los expertos. Es muy útil mirar de cerca a las criaturas más increíbles de la Tierra.
4. Donar.
Cuando se visite los zoológicos y las reservas naturales locales, es recomendable pagar el precio de la entrada. Las donaciones ayudan a mantener estas áreas de conservación vital.
5. Pronunciarse.
Compartir con la familia y los amigos la pasión que se siente por la conservación de la fauna silvestre. Decirles a los amigos cómo pueden ayudar. Pedir a quién se conoce que se comprometa a hacer lo posible por acabar con el tráfico de la fauna silvestre.
6. Comprar con responsabilidad.
Al no comprar productos fabricados con partes de animales en vías de extinción se puedes lograr que el tráfico de la fauna silvestre deje de ser un negocio que genere beneficios.
7. Dar una mano.
La basura no es sólo fea, sino que es dañina. Las cabezas de las aves y de otros animales pueden quedar atascadas en las anillas de plástico. Los peces se pueden enredar en las redes. Además, la basura contamina los recursos naturales de todos. Se puede ayudar mucho tirando la basura en los lugares destinados a ello.
8. Reciclar.
Se pueden encontrar nuevas maneras de usar cosas que se tiene. Si no se puedes reutilizar esos materiales, reciclarlos. El zoológico de Minnesota anima a sus visitantes a reciclar los celulares para reducir la demanda del mineral coltán, que se extrae de bajíos donde viven los gorilas.
9. Restaurar.
La destrucción de su hábitat es la principal amenaza para el 85 por ciento de especies amenazadas y en peligro de extinción, de acuerdo con la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza. SE puede ayudar a reducir esta amenaza plantando árboles en esos hábitats, restaurando pantanos o limpiando las playas de la zona donde se vive.
10. Participar, unirse.
Si a uno lo gusta la protección de los hábitats naturales, o la prevención del tráfico de fauna silvestre, se puede encontrar una organización dedicada a esos esfuerzos. Es recomendable hacerse miembro de esa entidad. Informarse y apoyar activamente a la organización que se haya elegido.
Ningún acto de conservación es demasiado pequeño. Es posible que no podamos recuperar las especies que ya hemos perdido, pero muchas otras a punto de extinguirse necesitan nuestra atención y acción inmediatas. No seas parte del problema. Sé la solución: Respeta y protege la vida silvestre de la Tierra.
Conclusiones
En la actualidad, el concepto inicial de "vida silvestre" (equivalente a fauna salvaje) se ha ido ampliando para incluir no solamente animales sino también a plantas y ecosistemas (incluso paisajes) y vendría a incluir la flora silvestre y la fauna salvaje de una región dada, aún cuando todavía se le dé énfasis a los animales.
Flora silvestre son las plantas de una región que crecen sin cultivar; aunque pudieran incluirse las malezas de los cultivos, es preferible no incluir las especies que crecen en los campos de cultivo (cultivadas o no).
Fauna salvaje es el conjunto de animales que no han recibido la domesticación o cría por los humanos o que posteriormente han adquirido la condición salvaje en escapes accidentales o por razón de programas de repoblación de fauna.
La conservación de la vida silvestre es la conservación de especies de animales y plantas que se encuentren en estado salvaje. Esta es una conservación especial cuyo objetivo es que pueda continuar adelante el ciclo de reproducción de las especies sin que las mismas sean amenazadas. Al hablar de conservación se implica que no serán las generaciones actuales quienes podrán ver los resultados de la misma, sino las generaciones futuras.
La vida silvestre también se traduce en migración y turismo. Muchos países han desarrollado su sector turístico alrededor de sus paisajes naturales. Los países africanos, han logrado atraer a través de la historia a personas de todo el mundo, gracias a su rica cultura de vida salvaje.